Ok, pensaba ponerlo al final, pero no, lo escribo aquí. Mirad los vídeos que os enlazo, hijos de puta, tanto las canciones como los hipervínculos, que uno se los curra para encontrar los adecuados e insertarlos, y comentarlos con vosotros después, y luego nadie los ve. Capullos. Os quiero.
Algunos de vosotros me habéis pedido que me aparte en cierto modo del tema principal y hable de cosas que no tengan que ver con el gimnasio.
Lo que ocurre es que no os dais cuenta de que ya lo hago. Utilizo la excusa de "esto se me ha ocurrido mientras hoy estaba en la sala de máquinas" para hablaros de mis mierdas. Y está bien. A vosotros os gusta, y a mí más.
Aunque, realmente, esto de hoy sí que se me ha ocurrido en la sala de máquinas. Veréis, estaba yo realizando un ejercicio, y sorprendiéndome porque se me hacía mucho más fácil que cuando comencé a hacerlo, y justo en ese momento, llega el monitor y me dice que, efectivamente y como habéis podido inferir por el título, lo estaba haciendo mal.
Y es que, si algo te parece fácil, lo estás haciendo mal.
Esto no se limita ni mucho menos a un gimnasio, ni siquiera al deporte, sino que es un axioma que se puede transportar con facilidad a la vida diaria. Porque ¿Cuántas veces habéis dicho o escuchado la frase "ya decía yo que me parecía demasiado facil"?
Que sí, que no os estoy descubriendo El Dorado (grandísima película), lo sé, pero me parece algo sobre lo que merece la pena reflexionar. Y es que no me refiero sólo a que algo te parezca demasiado fácil, sino a las veces que tomas el camino fácil. La distancia más corta (según el saber popular) es la línea recta, pero quizá no sea la más adecuada. Si quieres construir un camino entre dos lugares que tienen una casita de por medio, sí, puedes hacerlo en línea recta, pero te cargas la casa. Y jodes la vida a los habitantes, Quizá la línea recta sea el camino más fácil, pero no el más adecuado.
No me enrollo mucho más, que he quedado para tomar cerveza. Pero pensad por un momento si estáis tomando el camino fácil en algún aspecto de vuestra vida, y a quién podéis estar perjudicando, ya sea por comodidad, por miedo, o porque simplemente no os habéis parado a pensar en que existe otra opción.
Besis de sandía.
PD: Me encantan las postdatas.
PD2: Como siempre, vídeo graciosete para tragar toda esta cosa no graciosa, aquí.
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